50 momentos en los que podrías aprender un idioma en tu teléfono en lugar de perder el tiempo
¿Quieres aprender un idioma pero necesitas que alguien o algo te anime? En Babbel nos hemos motivado así que en lugar de un par, te ofrecemos 50.

- Cuando te despiertas por la mañana, pero no quieres salir de la comodidad de tu cama.
- Mientras te bebes el café mañanero, en lugar de mirar al infinito en tu aburrida cocina.
- En ese rato muerto en el que esperas a que algo se caliente en el microondas.
- Cuando vas en el metro, porque aprender un idioma en lugar de jugar a juegos online es muy underground (¿lo pillas?).
- Cuando quieres comprarte ropa online pero en realidad, ni tienes el dinero ni te hace falta más ropa.
- Mientras esperas a que se ablande el muesli.
- Cuando te apetece comer entre horas y para evitarlo necesitas entretenerte.
- De camino al examen de idiomas, mientras tu madre conduce y tú vas sentada en el asiento del copiloto.
- En el bar de un país extranjero, aprendiendo palabras útiles mientras esperas a que te sirvan.
- Cuando el plan inicial de ir al gimnasio falla pero aún así quieres sentir que hiciste algo productivo hoy.
- En el baño. No pienso desarrollar este punto.
- En el supermercado, cuando solo hay señoras mayores delante de ti en la cola para pagar.
- Cuando te das cuenta de que nunca conseguirás el trabajo de tus sueños a base de soñar, sino añadiendo ese idioma extra en tu currículum.
- Cuando se te acaban los datos del teléfono, no encuentras wifi por ningún lado y recuerdas que te bajaste un par de lecciones de portugués para aprender offline.
- Cuando vas a la peluquería y no te apetece hablar con el peluquero ni mirarte en el espejo gigante con el pelo pegado a la cara.
- Cuando estás navegando por internet y te das cuenta de que hay demasiadas palabras que AÚN no entiendes.
- Cuando vas a una conferencia que resulta ser superaburrida y además no tiene diapositivas entretenidas.
- Mientras esperas a que tus padres se conecten a Skype para llamarte (sabemos que esto puede llevar un rato).
- En el tiempo de descanso de un partido, si no te haces pis.
- Cuando te encuentres de vacaciones en el extranjero, en lugar de perder el tiempo con el mapa en la mano… ¡aprende las palabras para preguntar por direcciones!
- Cuando el libro que estás leyendo en la playa se te llena de arena y deja de ser legible y quedarte sin hacer nada simplemente viviendo la vida es demasiado aburrido…
- En lugar de estar mirando apps absurdas en tu teléfono (tipo, mirar la app del tiempo cuando afuera está lloviendo…).
- ¿He mencionado ya el metro? Esto es aplicable a cualquier medio de transporte en el que tú no conduzcas: el autobús, el coche, un camello, un barco, etc.
- En lugar de perder todo ese tiempo mirando diccionarios en internet… ¡podrías estar aprendiendo las palabras directamente!
- Mientras haces la cola de la máquina de café de tu empresa… porque te caen mal tus compañeros de oficina.
- En la puerta de embarque, cuando te tienen esperando como sardinas en lata y lo único que puedes sacar de tu bolsillo sin que se desestructure el tetris de tu maleta de mano es el teléfono.
- Cuando estés volando, porque puedes usar Babbel offline… eso sí, ¡acuérdate de bajarte las lecciones de antemano!
- La semana antes de mudarte a un país extranjero, cuando la gente te dice que no serás capaz de aprender el idioma de tu país adoptivo… y quieres hacerles ver que se equivocan.
- Mientras esperas a que ese amigo o amiga lentos y pesados se preparen para salir.
- En lugar de mirar tantos memes… (solo hace falta una ración de memes al día, mientras que un idioma es para toda la vida).
- Para impresionar a la persona que está a tu lado en la sala de espera.
- Cuando estás un poco triste y te medio apetece escuchar esa canción de Drake por décimo octava vez, pero en su lugar, sabes que aprender algo nuevo te pondrá de buen humor.
- Para evitar escribirle un mensaje a esa persona que sabes que no debes…
- Cuando el próximo tren llega en 10 minutos.
- Mientras esperas a que te llamen en esa entrevista de trabajo porque sabes que te preguntarán qué estabas haciendo mientras esperabas, y les dirás que estabas aprendiendo sueco y quedarás como una persona hábil e inteligente.
- Cuando llegas a un sitio demasiado pronto a una cita (¿Qué? ¿Esto de verdad puede pasar?).
- Mientras esperas a tu cita de Tinder, porque ver a alguien mirando Facebook o Instagram queda necesitado e inseguro, mientras que ver a alguien aprendiendo un idioma queda cool e interesante.
- Cuando estás en el sofá sin hacer nada y entonces llega tu madre y te dice que está harta de verte en el sofá sin hacer nada.
- Mientras esperas a que se te seque el pintaúñas.
- Cuando miras el teléfono a ver si tienes notificaciones nuevas y no tienes ninguna, pero actúas como si las tuvieras (y queda fatal).
- Mientras esperas a que hierva el agua para hacerte un té.
- Cuando la persona con la que has quedado llega tarde (ahora sí).
- Cuando ya le has dado 80 veces a la izquierda en Tinder y todavía crees en el amor verdadero (y existe una gran probabilidad de que él o ella sean extranjeros).
- En un concierto en el que te aburren los teloneros y tienes que hacer un poco de tiempo.
- Para recobrar la sobriedad en el autobús nocturno de vuelta a casa.
- Cuando crees que es el momento de salir de tu zona de confort, pero no sabes cómo.
- Antes de irte de copas a un bar en tu primera noche en una ciudad extranjera.
- Cuando la comida está muy caliente y necesitas algo para distraerte del hambre que tienes mientras se enfría un poco.
- Mientras esperas a que se cargue el streaming de tu serie favorita.
- Cuando no consigues dormirte y ya has mirado todas las redes sociales y no hay nada nuevo… ¡así que de paso puedes aprovechar ese rato para aprender a decir “buenas noches” en otro idioma!
¿En serio quieres más?