Conservar un trabajo es una tarea lo suficientemente dura. Tener lecciones entre reuniones de Zoom puede parecer un reto aún mayor, pero solo hasta que utilices algunas estrategias. Y es que, después de todo, no tienes que sacrificar tu cordura para encajar el aprendizaje de un idioma en tu horario trabajando desde casa.
¿Cuál es el mayor motivo? Realmente no necesitas dedicar mucho tiempo cada día. Si puedes reservar 10 o 15 minutos diarios, es más que suficiente. Puede parecer ilógico, pero aprenderás más si te comprometes a solo estudiar un poco cada vez (y lo haces a lo largo del tiempo, en lugar de quemarte después de pasar dos noches enteras estudiando).
Es parte del motivo por el que las lecciones de Babbel son breves e ingeniosas. Este método de «micro aprendizaje» ayuda a que tu cerebro evite la sobrecarga cognitiva que ocurre cuando intentas absorber demasiada información al mismo tiempo. En su lugar, solo introduces la cantidad de información que puedes gestionar a la vez, y luego nuestro Gerente de revisión te reintroduce ese material en intervalos con una duración estratégica para ayudarte a que pase a tu memoria a largo plazo.
El otro motivo es que hay cosas que puedes hacer para aprender en piloto automático, incluso sin pensar en ello. Por ejemplo, puedes cambiar los ajustes de tu teléfono al idioma que estás aprendiendo y tener una mini lección automática cada vez que uses tu teléfono (es decir, una media de 2617 veces al día).
A pesar de que tenemos muchas otras ideas para crear un entorno que te permita aprender por ósmosis, el principal objetivo de este artículo es que crees un horario para estudiar trabajando desde casa según los objetivos de tu aprendizaje.
Para ello, hemos recopilado diversos «huecos oportunistas» (esos pequeños respiros de 10 o 15 minutos de tu día) y los hemos clasificado en categorías por la mañana, por la tarde y por la tarde noche, de modo que puedas crear tu horario ideal trabajando desde casa. También hemos añadido algunas sugerencias adicionales de cosas que puedes hacer durante ese tiempo, además de «hacer una lección de Babbel en tu teléfono». Dependiendo de cuál sea tu capacidad, puedes intentar completar una lección o una tarea al día, o quién sabe…quizá incluso puedas interactuar con tu nuevo idioma cada vez que comes.
Permite que esta plantilla te inspire para que sigas con el buen trabajo y escoge solo las sugerencias que funcionen para ti, ¡además siempre puedes adaptarla según tus necedades!
Cómo encajar el aprendizaje de un idioma en tu horario trabajando desde casa
Mañana
Asumamos que no estás a tope cuando empiezas el día. Quizá prefieras dedicar las primeras horas a comprobar tu bandeja de entrada, leer las noticias y beber café. Por supuesto, puedes hacer una lección tan pronto como te levantes, pero también puedes comenzar con más calma.
- Haz una lección mientras estás: esperando a que el café o el té se haga; bebiendo tu café o té, después de completar tu meditación matinal (pero antes de que hayas abierto tu email) o antes de meterte en Slack.
- Escucha un podcast breve en el idioma mientras estás preparando el desayuno y el café. Si no sabes por dónde empezar, tenemos nuestra propia selección en español, francés e italiano.
- Lee las noticias en el idioma que estás aprendiendo después de responder los e-mails más importantes.
- Si te gusta escribir un diario, dedica 10 minutos a escribir por la mañana. Si necesitas un poco de estructura, intenta escribir cómo te sientes y cómo crees que tu día va a ser.
Tarde
Muchos estudios parecen estar de acuerdo en que el mediodía es la mejor hora para aprender cosas nuevas. Por supuesto, esto significa cosas diferentes para cada persona. Si te levantas temprano, tu «mediodía» probablemente sea antes que el de tu vecino que trasnocha.
Tenemos más sugerencias sobre cómo optimizar tus horarios de aprendizaje desde casa según tus patrones de sueño y comida, pero, generalmente hablando, es una buena idea que evites hacer nada durante el bajón después de comer (sabes de lo que hablamos). En su lugar, intenta estudiar por la tarde, cuando estás alerta y has tomado una dosis de cafeína, pero no te importaría tener un descanso en tu día mientras trabajas desde casa.
Si puedes permitirte echarte la siesta después de comer, un breve descanso puede ayudarte a consolidar lo que acabas de aprender.
- Haz una lección mientras estás: comiendo, estirando, dando un paseo para tomar un poco de aire fresco, esperando a que la lavadora termine o luchando para no ser absorbido por Twitter. Este probablemente sea el mejor momento del día para centrarte en aprender información nueva.
- Escucha música en otro idioma mientras trabajas (¿crees que podrás hacer las dos cosas al mismo tiempo?). Para comenzar, puedes echar un vistazo a nuestras listas de reproducción para principiantes en alemán, sueco y español.
- Y también puedes utilizar Twitter, pero haz que sea productivo y tuitea en otro idioma.
- Convierte en una persona que está encerrada y necesita hablar consigo misma, y practica tus habilidades orales contigo mismo (aún mejor si lo haces durante tu paseo por la tarde o tu clase virtual). ¡Sí, puedes representar a ambas personas en la conversación! Esto probablemente te ayude cuando estés en una situación real.
Tarde noche
Observa que no hemos dicho «noche». Porque te recomendamos que no dejes todo para la noche ya que, para tu sorpresa, dormir es uno de los mejores aliados para aprender.
Si esta declaración no te convence, un estudio de la Universidad de Notre Dame realizó una investigación con dos grupos de estudiantes para ver si eran capaces de memorizar parejas de palabras. Un grupo se fue a dormir inmediatamente después de aprender, y el otro no. Cuando comprobaron lo que los estudiantes podían recordar 24 horas más tarde, el grupo que había descansado bien tuvo unos resultados mejores que sus compañeros adormilados. Dormir ayuda a que tu cerebro consolide lo aprendido, ¡lo que a su vez ayuda a memorizar!
- Haz una lección mientras estás: relajándote en el sofá, esperando a que la pasta hierva o a que tu comida para llevar llegue a casa. O justo antes de encender Netflix o irte a la cama. Este probablemente sea el momento ideal del día para centrarte en repasar lo que ya has aprendido.
- No tienes que renunciar a Netflix, pero opta por una serie de televisión con subtítulos en otro idioma o doblada al idioma que estás aprendiendo. Consejo: puedes buscar por idioma subtitulado en Netflix.
- Ve una película en idioma extranjero antes de ir a la cama. Dependiendo de tu nivel, puedes verla con subtítulos en español o intentarlo sin ellos.
- Conecta con alguien que habla (o estudia) el idioma que estás aprendiendo en tu teléfono, WhatsApp, Zoom o cualquier otro medio de comunicación que utilices. Quizá sea un amigo con el que te gustaría ponerte al día o una persona con la que quieras conectar intencionadamente para aprender. Sea lo que sea, es una buena ocasión para practicar conversando a una hora del día en la que normalmente llamarías a alguien.
Este artículo se publicó originalmente en la edición en inglés de la revista de Babbel.