En honor al Día de la Conciencia Negra, celebrado el 20 de noviembre, hemos creado una lista de palabras que se usan diariamente en portugués brasileño y que se derivan de la fuerte herencia africana presente en este país. Según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), Brasil es hoy el país con el mayor número de afrodescendientes después de África. De hecho, alrededor del 54 % de la población es de origen africano.
Las religiones africanas, tales como candomblé y Umbanda, han desempeñado un papel muy importante en la preservación de estas expresiones. De hecho, es esencial que los devotos sepan palabras de origen africano para vivir y entender los rituales, conectarse con su identidad y sentirse parte de una comunidad.
Aquí está nuestra selección de palabras en portugués con origen africano:
ACARAJÉ: esta palabra deriva de los lemas de origen africano àkàrà, bola de fuego y je, comer. Es una especie de albóndiga frita, no muy ligera, hecha de frijoles, cebolla, sal y dendê (aceite de palma).
CAFUNÉ: deriva del idioma kimbundu, que todavía se habla hoy en Angola. Fazer cafuné significa acariciar o rascar la cabeza de alguien.
DENGO: literalmente significa “lamento infantil”, pero la palabra de la que deriva (en el idioma bantú, popular en África centro occidental) tiene un significado más profundo y ancestral. De hecho, indica la necesidad de calor humano de una persona a otra.
GINGA: en una película sobre Pelé (y que se llama Pelé), apareció este término para describir el estilo de los futbolistas brasileños, cuando caminan un poco hacia atrás para confundir al oponente y regatear. Esta palabra también se utiliza en capoeira para describir el paso básico de la lucha.
IIEMANJÁ: sin duda, una de las divinidades más fascinantes y queridas de los brasileños, la diosa del mar. En la víspera de Año Nuevo, la tradición llama a saltar 7 olas antes de las 12 de la noche, volviendo la mirada al suelo y arrojando flores al agua en homenaje a Iiemanjá.
JILÓ: fruta típica, verde, de sabor amargo y muy saludable.
MARACATÚ: esta palabra hace referencia al tipo de tambor que se utiliza, especialmente durante el carnaval, en el noreste de Brasil, donde la influencia africana es más fuerte que en otras partes del país.
NENÊ: bebé recién nacido, de pocos meses de edad. La palabra nenê parece derivar del idioma umbundu, que todavía se habla en Angola y Namibia.
ORIXÁ: son dioses que se transformaron en ríos, árboles y plantas. Se trata de los intermediarios entre los hombres y las fuerzas de la naturaleza, están dotados de mucho poder y son capaces, por ejemplo, de influir en los cultivos.
PAMONHA: dulce típico del noreste de Brasil, de origen africano, a base de maíz triturado y sazonado con sal o azúcar. Se sirve en una hoja de plátano.
URUCUNGO: mejor conocido como birimbau, es el instrumento musical de percusión que se usa en la capoeira (que, como ya sabrás, es una forma de lucha disfrazada en danza).
VATAPÁ: es un plato típico de la cocina bahiana, preparado con prácticamente todo lo que se tenga disponible en la cocina, como sucede con los platos pobres: harina, la cabeza de un pescado, guindilla, cacahuetes, anacardos, leche de coco, cebolla, tomate, jengibre, cilantro, dendê, aceite de oliva… Se sirve con gambas, pescado o pollo.
XODÓ: se usa como un diminutivo afectivo, no solo para las personas, sino también para los objetos inanimados.
ZANZAR: vagar, caminar sin rumbo o sin un destino preciso.