Los vicios de lenguaje: tipos de vicios con ejemplos y consejos

El propósito de los tipos de lenguaje, como la comunicación verbal y escrita es para expresarte. Sin embargo, expresar tus ideas y pensamientos puede ser malinterpretado debido a la existencia de los vicios de lenguaje que practicamos sin siquiera saberlo. Los vicios del lenguaje son prácticas de comunicación habladas y escritas relacionadas con la gramática y el vocabulario utilizado, que dificulta la comprensión de tu mensaje. Estos son los tipos de vicios más utilizados: ambigüedad, arcaísmo, barbarismo, cacofonía, cosismo, dequeísmo, extranjerismo, idiotismo, impropiedad, metátesis, neologismo, pleonasmo, y solecismo. Muchos se preguntan si hay una manera de evitar estos malos hábitos lingüísticos y la respuesta es sí. Conocer los tipos de vicios, sus significados y ejemplos de cada uno es el primer paso, así que vamos a entrar en los detalles.
¿Cuáles son los vicios de lenguaje más utilizados con ejemplos?
Consejos para evitar el uso de vicios en la comunicación oral y escrita
Escuchar activamente
Escuchar activamente te permite escuchar no solo el mensaje general, sino también los detalles expresados. Escuchar cuidadosamente también te ayuda a detectar patrones en la gramática y la estructura de la oración que te ayudarán a hablar e incluso escribir gramaticalmente correcto en el futuro. Por último, un recordatorio de que escuchar siempre te ayuda a dominar tu pronunciación, especialmente pronunciando palabras difíciles con combinaciones de palabras y sílabas únicas.
Elige las palabras sabiamente
Antes de hablar, tómate una pausa para pensar en qué detalles o mensajes quieres transmitir, especialmente teniendo en cuenta con quién estás hablando, ya sea tus colegas o tus amigos. Esto ayuda a evitar pensamientos redundantes, repeticiones y ambigüedad cuando hablas con otros.
Revisar y corregir
Cuando se trata de comunicación escrita, la revisión es esencial para evitar errores gramaticales escritos, ambigüedad, repetitividad y mala interpretación en sus mensajes. Un consejo adicional: si lees lo que escribiste en voz alta, detectarás errores y corregirás de manera más efectiva.
Hablar despacio
Si hablas rápido, eso puede dificultar a la otra persona en escuchar activamente y puede mal interpretar lo que dijiste. Como resultado, eso puede llevar a una respuesta que puede ser malinterpretada en tu mente también. Hablar despacio puede ayudar a evitar la cadena de confusión.
Pídele a otros que disminuyan la velocidad
No tengas miedo de hacer preguntas, especialmente pedirle a alguien que disminuya la velocidad cuando habla. Al final del día, el propósito de tener una conversación agradable es que ambos entiendan y respondan cuidadosamente a los sentimientos, ideas y mensajes de los demás con precisión.