Aquí en Babbel, nos divierte aprender y hablar sobre el aprendizaje de idiomas. Después de todo, es un tema del que nos ocupamos a diario. Por supuesto, incluso antes de convertirme en una experta en el aprendizaje de lenguas, me encantaba aprender idiomas por mi cuenta, experimentarlos y descubrir lo que realmente los hacía tan especiales.
Además del argumento evidente de que aprender idiomas te puede hacer más feliz, hay muchas razones por las cuales todos deberíamos aprender un nuevo idioma. Algunos son más personales que otros, pero en realidad la mayoría de razones son muy prácticas.
Aprender idiomas expande tus horizontes
Como experta en el aprendizaje de idiomas, me he dado cuenta de que aprender un nuevo idioma siempre ha hecho más abierta a otras culturas. Obtienes ideas inimaginables sobre otros mundos. No solo aprendes el vocabulario, la ortografía y la gramática, sino también detalles regionales. ¿Cómo canta el gallo en esa cultura? ¿Cómo expresan sus pensamientos? Por ejemplo, el francés fue por muchos años el lenguaje tributario por excelencia. ¿Por qué? ¿Cuál es el trasfondo histórico de esto? ¿Es posible descubrir esta influencia del francés en otras esferas y en otros países? Es emocionante seguir estas preguntas y conocer el país (o países) donde se habla este idioma.
Nuevas formas de comunicación: de cerca y de lejos
Cuando hablas el idioma local, se abre ante tus ojos un mundo completamente nuevo de oportunidades. Ya no eres un turista más entre la multitud: puedes conversar con los lugareños, pedirles consejos específicos y alejarte de las aburridas y saturadas rutas habituales. Además, incluso los detalles más pequeños harán que tus visitas a otros lugares sean mucho más agradables y permanezcan en tu memoria por más tiempo. Si necesitas comprar algo, ya no tendrás que señalar las cosas, sino que podrás hablar con el vendedor o la vendedora; puedes pedir ayuda en el autobús o en la estación de metro si la máquina de boletos no funciona y, lo mejor, no tendrás que tener miedo de pedir comida sin saber qué te van a traer.
Aunque todos seamos un poco tímidos al principio, si hablas otro idioma seguramente alguien en algún momento habrá comentado positivamente tus habilidades lingüísticas. ¡Créeme! La respuesta positiva ante el intento de hablar el idioma local es irremplazable, sentirás un boost casi automático en tu autoestima. Hace poco estuve comiendo con dos colegas brasileños y una colega alemana. Los tres se reúnen regularmente para el almoço brasileiro (almuerzo brasileño), una “excusa” para hablar portugués. Yo solo hablo un par de palabritas en portugués y decidí unirme un día, pensando que sería más bien un almuerzo donde yo no desempeñaría un papel muy activo. Para mi sorpresa, pude participar en la conversación incluso con mis básicas cinco palabras. Al final, ¡la comida se enfrió y quedé con ganas de empezar a trabajar en mis habilidades en portugués!
Abdominales para el cerebro
Aprender un nuevo idioma no solo representa nuevas formas de comunicación, sino que también es un punto positivo para tu salud. Similar a la forma en que nuestro cuerpo desarrolla los músculos a través del entrenamiento físico, nuestro cerebro también se fortalece con el entrenamiento mental. El uso regular de un nuevo idioma, la adquisición de vocabulario y la comprensión de la gramática tienen un efecto positivo en nuestra memoria. Los estudios científicos también han demostrado que el cerebro de los humanos multilingües es más resistente a los procesos de degradación relacionados con la edad, como la demencia. Dado que el cerebro puede cambiar una vida a través de la estimulación adecuada, tanto las personas más jóvenes como las mayores se benefician del aprendizaje de idiomas.
Extra skill para trabajar en el extranjero
Muchos sueñan con vivir en el extranjero por un tiempo, ya sea para estudiar o para trabajar. Si hablas uno o incluso varios idiomas, ¡felicidades! Estás cada vez más cerca de conseguir ese objetivo. ¿Siempre quisiste hacer una práctica en Londres o estudiar un semestre en la Sorbona en París? ¿O viste una gran oferta de trabajo en Hamburgo?
Bueno, seamos realistas, no necesitas salir de tu país para que hablar otros idiomas tenga un impacto positivo en tu carrera profesional. Muchas empresas operan a nivel internacional y esperan que sus empleados puedan comunicarse en dicho contexto. Por lo tanto, los idiomas pueden ser de gran ayuda para lograr tus objetivos y darle un impulso a tu carrera.
La simple satisfacción personal
Cuando logras ver tu serie favorita en versión original por primera vez y entiendes T O D O, te das cuenta de que, a partir de ese momento, las películas y series solo tienen sentido en su idioma original. A mí me pasó con la serie Friends. De repente, el doblaje me sonaba superraro, las voces parecían falsas y sentía que algo no cuadraba con las emociones. Los millennials me entienden, solo por eso vale la pena aprender un nuevo idioma. Por el puro placer de disfrutar de la película. Por cierto, no es un secreto que ver pelis y series en su versión original te ayuda a practicar la gramática y a ampliar tu vocabulario escuchando y aprendiendo frases cotidianas.
Lo mismo me pasó con la música. Cuando regresé a casa después de unas vacaciones en Italia, de repente escuchaba italiano en todas partes. ¡En la radio sonaba Una festa sui prati de Adriano Celentano y de repente comencé a entender muchas cosas! Antes, apenas podía distinguir las palabras. Desde entonces, disfruto cada vez que logro entender canciones en un idioma diferente al inglés, alemán o español.
Nadie garantiza que será perfecto
Me guardé lo mejor para el final: la perfección está totalmente sobrevalorada en el aprendizaje de idiomas. Todos los hablantes nativos toleran los errores, e incluso los valoran más que cuando ni siquiera lo intentas y prefieres no comunicarte. En otras palabras, nadie ha dicho nunca que tengas que dominar un idioma perfectamente para que te entiendan. Al cometer errores y usarlos como motivo para hablar con un hablante nativo, ya estás aprendiendo. Hablar sobre el error por sí solo ayuda a aprender y se puede memorizar mucho mejor cómo se llama correctamente.
Aprendí siete idiomas (o bueno estoy en ello). Algunos los hablo muy bien, en otros solo tengo las habilidades básicas. Sin embargo, cada idioma que he aprendido ha enriquecido mi vida de alguna manera. No cambiaría por nada las experiencias que he ganado con cada idioma y las ideas que he adquirido sobre cada país y su gente, sobre el idioma en sí y también sobre mí misma.