Un aprendizaje efectivo de idiomas es aquel que no utiliza un método único para todos los estudiantes. Si aprendes un idioma para viajar o por trabajo, te enfrentarás a diferentes retos y requisitos previos, en comparación a cuando se aprende un idioma por y para uno mismo. A continuación, vamos a ver los obstáculos que puedes afrontar al aprender un idioma por tu cuenta. Por supuesto, también te ofrecemos consejos sobre cómo superar estos desafíos y alcanzar el éxito cuando se hace por motivos de superación personal.
¿Estás aprendiendo un idioma para tu propia satisfacción? Si te enfrentas a este desafío intelectual, presta atención a lo siguiente:
Si aprendes un idioma para entender mejor el mundo, porque te gustan las películas francesas, tienes amigos que hablan otros idiomas o alguna otra razón personal, solo te puedo decir una cosa: ¡bien por ti! No existe un pasatiempo más práctico. No solo porque al final hablarás una nueva lengua, sino porque aprender un idioma reduce el estrés y, además, entrena de manera eficiente tu cerebro al activar y enlazar varias áreas del mismo. Quizás el desafío más grande al que te enfrentes sea la motivación. Suele pasar que si no se tiene un objetivo claro o ninguna fecha límite o presión externa, como mudarse al extranjero en medio año, tu afición por el aprendizaje de idiomas disminuirá fácilmente. A continuación te explicamos cómo evitar errores en el aprendizaje de idiomas por enriquecimiento personal.
Estas estrategias de aprendizaje te ayudan a mantenerte motivado y seguir estudiando un idioma por superación personal:
1. Establece metas y propósitos
Al no tener una presión externa, el hecho de aprender un idioma por y para ti necesita de metas de las cuales sentirse orgulloso. Estas pueden ser objetivos simples: realizar una lección de Babbel cada día; tras un mes, pedir en un restaurante en ese nuevo idioma; leer un libro para niños después de tres meses; o ver una película con subtítulos en tu idioma materno tras medio año. Pero también puede ser una meta más extravagante: ¿por qué no organizar un viaje o una conferencia en ese nuevo idioma? Si te interesan los desafíos intelectuales, también te recomendamos leer tu libro favorito en tu idioma de aprendizaje o superar un examen de idiomas con Babbel o externamente.
2. Aprende regularmente
Sin presión externa puede suceder que el aprendizaje decaiga. Para evitarlo, debes establecer una rutina de estudio desde el principio y crear un nuevo hábito. Siguiendo esto, es importante asegurarse de crear metas medibles y realistas. Si planeas estudiar una hora diaria, es probable que vayas camino al fracaso. El método Babbel te ayuda a aprender con lecciones que solo te tomarán 15 minutos al día, y por tanto, garantiza más flexibilidad de horarios. Por otro lado, aprender a la misma hora cada día (por ejemplo, en tren de camino al trabajo) te ayuda a establecer una rutina. ¡Y luego consiéntete una pequeña recompensa al completar con éxito tu práctica! Un rico helado o, incluso, unas vacaciones en algún país donde se hable el idioma que estás aprendiendo, a modo de sugerencia.
3. Encuentra un método de aprendizaje de idiomas efectivo (y no el que asegura un pseudo éxito)
“Has completado una lección de nuestra app de aprendizaje de idiomas. ¡Felicidades! Has conseguido un tres por ciento en fluidez”. Muchas apps te llevan a conseguir objetivos altos en un corto plazo a través de diferentes juegos y haciéndote pensar que estás aprendiendo de manera efectiva. Pero a largo plazo, es frustrante porque, como seguramente ya te habrás dado cuenta, el aprendizaje de idiomas es más difícil de lo que se comercializa a menudo. En su lugar, busca un método de aprendizaje que te traiga éxito en el día a día. En comparación con otras ofertas de aprendizaje de idiomas, todas las lecciones de Babbel están orientadas a que seas capaz de llevar a cabo una conversación real con personas reales lo antes posible. Esto puede sonar a más trabajo, ¡pero es la mejor recompensa al aprender un idioma!
4. Incluso si es por tu propio enriquecimiento: ¡atrévete a hablar con otros!
Estás aprendiendo para ti, pero no hay que olvidar que los idiomas están ahí como forma de comunicación con los demás. No olvides este aspecto, incluso si solo consideras el aprendizaje de idiomas como un pasatiempo interesante. Confía y habla tu nuevo idioma con los demás. Al principio, no importa si se trata de hablantes nativos o incluso otros estudiantes de ese idioma. Si aprendes el idioma para otra persona, como tu pareja o algún amigo, estos no siempre son la opción perfecta, puesto que puede ser difícil conocer a alguien en un idioma y luego cambiar a otro. Si deseas practicar un idioma con hablantes nativos, las reglas básicas te ayudarán. Por ejemplo, podrías decir: “¿Quedamos este viernes para cocinar y hablar solo en francés?”. Algo así puede enriquecer una amistad ya existente. Como alternativa, puedes comenzar a hacer un tándem, ¡y tal vez incluso hacer una nueva amistad!
5. Haz interesante el proceso de aprendizaje
No olvides que aprendes por diversión. Así que, ¡diviértete aprendiendo! ¿Cuáles son tus otras aficiones? ¿Yoga? Seguramente haya vídeos de yoga en tu idioma de aprendizaje. ¿Dibujo? Puedes hacer un dibujo pequeño cada día con tres palabras nuevas. Si unes tus aficiones al aprendizaje de idiomas, ahorrarás tiempo y el proceso nunca se volverá aburrido. Por cierto, estos enfoques creativos para aprender idiomas son muy beneficiosos, debido a que se entrenan y se activan más áreas del cerebro, que si solo practicaras delante de un ordenador. Poco a poco, irás incorporando el nuevo idioma a tu vida cotidiana y no percibirás que estás aprendiendo cada vez más y más. ¡Antes de que te des cuenta, habrás hecho un gran progreso!