Ilustraciones de Jana Walczyk
Conocer personas de países lejanos en contextos cotidianos, experimentar la cotidianidad en una cultura diferente o probarse a sí mismo en un entorno ajeno a todo lo conocido. Las razones para sumarse a un programa de intercambio de trabajo en el extranjero, también conocido como working holiday, son muchas, pero tal vez la más tentadora sea la posibilidad de recorrer el mundo con bajo presupuesto. A lo largo y a lo ancho del planeta hay desde hostales hasta fundaciones que ofrecen alojamiento gratuito a cambio de algunas horas diarias de trabajo.
¿Buscás playa o montaña? ¿La efervescencia de una gran ciudad o la lenta cadencia de un pueblito alejado de las grandes metrópolis? ¿Te gustaría estar en contacto con viajeros de todo el mundo o preferís sumergirte de lleno en la realidad local a través de acciones solidarias? ¿Preferís el desafío de un destino cuyo idioma desconocés por completo o uno con el que estás más familiarizado y que querés perfeccionar? La cantidad de decisiones que hay que tomar en un primer momento puede resultarte abrumadora. Por eso, mejor ir paso a paso.
El idioma: una herramienta imprescindible
Un buen consejo es empezar por elegir el país al que vas a viajar. El programa working holiday está tan difundido que tendrás opciones en los cinco continentes. Y ante tanta oferta, el mejor criterio de selección es el dominio de la lengua del país que te interesa. Tu capacidad para comunicarte es determinante a la hora de definir el tipo de trabajo al que se puede aspirar y también impacta en la cantidad de cupos disponibles. A más conocimiento, más posibilidades.
Si hablas el idioma tendrás en tus manos una herramienta que te va a dar la oportunidad de conocer mejor el destino elegido: si estás viajando solo, ser capaz de comunicarte con los locales no solo te permitirá salir de tu zona de confort, sino que profundizará tu conexión con el lugar. Hay quienes se desalientan ante aquellos destinos donde la barrera idiomática es realmente desafiante como en algunos países de Asia o Medio Oriente. Sin embargo, hoy ya no hay excusas para lanzarte a la aventura. Tanto si se trata de un idioma que desconocés por completo como puede ser el turco o el indonesio, como de uno que querés perfeccionar, los cursos interactivos de Babbel te permiten prepararte en pocas semanas. Se adaptan a tus tiempos en un formato entretenido que te motiva a superarte día a día y que podés hacer antes, durante y después de tu viaje.
Si es tu primera vez fuera de Argentina y tu nivel del idioma es muy básico, te recomiendo destinos alejados de las grandes ciudades donde las personas tendrán más tiempo y mejor predisposición para socializar con vos. Otra buena idea es elegir los programas de intercambio que ofrecen los hostales, que son punto de confluencia de múltiples culturas: el lugar ideal para practicar diferentes idiomas mientras colaborás unas horas al día recibiendo huéspedes o preparando el desayuno a cambio de alojamiento.
Working holiday en la industria de la hospitalidad
- Tailandia
En Bangkok, la capital de Tailandia considerada la puerta de entrada al sudeste asiático, algunos hostales ofrecen la oportunidad de trabajar en la recepción por seis horas diarias con dos jornadas de descanso semanal a cambio de alojamiento, desayuno y lavandería gratis. En la página oficial de la Oficina de Turismo de Tailandia podés descargar mapas y descubrir los lugares imperdibles de Bangkok y en el consulado podés chequear los requerimientos para el visado. Aunque el idioma oficial es el tailandés, Bangkok figura entre los primeros puestos de las ciudades más visitadas del mundo por lo cual el idioma inglés es de uso muy extendido.
- Rusia
Bastante más desafiante desde lo lingüístico hasta lo estrictamente laboral, son algunos de los puestos de working holiday en Moscú. El entretenimiento y la promoción de las actividades sociales son algunas de las tareas solicitadas. Como los postulantes también deben estar aptos para llevar adelante las visitas turísticas por la ciudad es importante tener un dominio al menos básico del idioma ruso. En el portal oficial de turismo de Rusia vas a encontrar desde el régimen de visado para los turistas de diferentes países hasta consejos para tu seguridad personal. Y si te querés familiarizar con la ciudad que vas a tener que recorrer junto a los pasajeros del hostal, date una vuelta por la página oficial de la alcaldía de Moscú.
- Brasil
Si sos creativo y tu fuerte es la comunicación y las redes sociales, trabajar en algún hostal en São Paulo (Brasil) es un verdadero desafío para probar qué tan bueno es tu nivel de portugués. Con solo veinte horas de trabajo semanal y tres días libres vas a tener mucho tiempo para recorrer los principales atractivos paulistas. Así que si te gusta dejarte llevar por los consejos de los locales, en la página oficial de la ciudad podés encontrar los itinerarios favoritos de algunos habitantes que se declaran amantes de su lugar en el mundo.
Working holiday con conciencia ecológica y social
Los jóvenes nos preocupamos cada vez más por el impacto del turismo en el medio ambiente. Los viajeros ecorresponsables no derrochan recursos y buscan hospedajes amigables con la naturaleza. Si eres uno de ellos, te encontrarás con una gran oferta en programas de intercambio de trabajo. Muy cerca de las hermosas playas del Mar Egeo, en Turquía, Bodrum Ecofarm & Hostel es una granja ecológica, un camping y un hostal con una propuesta ideal para reconciliarse con la sabiduría de la madre tierra. Por ejemplo, a cambio de 25 horas semanales de trabajo con los animales, las plantaciones y de reparaciones domésticas, ofrece alojamiento, comidas, paseos y hasta clases de yoga. Los encantos turísticos de la zona están muy bien. Otra oferta destacada en este segmento es la de una comunidad autosustentable, en Montpellier, Francia, que busca ayuda para trabajos de jardinería a cambio de habitación y comida. También ofrecen bicicletas para recorrer este idílico destino mediterráneo de gran belleza arquitectónica y una muy tentadora oferta gastronómica.
El voluntariado también es una excelente alternativa para vivir una experiencia transformadora lejos de casa. La inmersión en la realidad del país que visitás es absoluta en estos programas en que los viajeros ofrecen ayuda a proyectos sociales, comunidades locales u organizaciones no gubernamentales a cambio de alojamiento y comida. Las ofertas laborales son variadas, y van desde la enseñanza y el cuidado de niños hasta la ayuda comunitaria en proyectos ecológicos. El exótico sudeste asiático es irresistible para muchos. En Indonesia, una fundación ofrece la oportunidad de relacionarte con niños mediante la enseñanza de inglés y deporte. Por 18 horas de trabajo semanales, podés obtener alojamiento, comida y paseos turísticos. El requisito es tener un nivel intermedio de inglés o principiante de portugués. La ubicación es perfecta tanto para quienes buscan vida urbana como playa. Las imágenes de este destino publicadas en la página oficial del ministerio de turismo son de una exuberancia tropical capaz de convencer al más indeciso. Además, esta web es un muy buen recurso para planificar tu viaje y chequear toda la documentación necesaria.
La claves para una postulación exitosa
Una vez que hayas definido tu destino y elegido una propuesta de intercambio, tenés que ser muy claro para conseguir el puesto seleccionado. Te presento una pequeña lista con las cosas que debes tener en cuenta antes de presentarte a cualquiera de los trabajos:
- En primer lugar, tené en cuenta que se recomienda aplicar en al menos ocho lugares distintos.
- Es imprescindible asegurarse de completar todos los datos y enviar una solicitud bien redactada, argumentando por qué te interesa hacer un intercambio y cuáles son tus habilidades.
- No copies y pegués la misma solicitud para todos tus potenciales anfitriones: cuanto más personalizado sea el texto, más efectivo.
- También es importante que leas detalladamente cuáles son las tareas y actividades requeridas.
- Hacé todas las preguntas necesarias antes de viajar y si algún quehacer te disgusta o te incomoda, no concretes el intercambio en ese lugar.
- Ser claro y honesto desde un principio son las bases para una buena experiencia.
Como verás, este tipo de programa no solo puede resultarte redituable desde el aspecto económico, sino que también te aporta un valioso capital humano y cultural: el descubrimiento del destino elegido desde una perspectiva más real que la que obtiene un simple y llano turista y la posibilidad de hacer amigos sin fronteras geográficas o idiomáticas.