El holandés es una lengua en donde la forma escrita de las palabras y su pronunciación son muy similares. Existen muchos dialectos y acentos, pero la forma reglada de esta lengua es entendida en todo el ámbito neerlandés. El método de Babbel para aprender este idioma está completamente adaptado a las habilidades de los hablantes de español.
Si alguna vez te has enfrentado a lenguas como el francés o el inglés, en las que la pronunciación no se corresponde con la forma escrita de las palabras, esto ha podido desanimarte en cierta medida. El motivo es que en este sentido el español es bastante diferente, ya que sí cuenta con una similitud mayor entre la escritura y la pronunciación. Sin embargo, esta característica puede servirte de ayuda en otros idiomas. Por ejemplo, el holandés también cuentan con esta correlación y, por ello, puede resultarte más sencillo que otros idiomas, porque la palabra escrita y la pronunciación son prácticamente idénticas.
Casi cada región de Holanda cuenta con un acento propio para hablar holandés. Muchos de ellos están reconocidos e incluso protegidos como lenguas del país. Así, podrías encontrarte durante un viaje de negocios o de placer con que hay zonas en las que existen palabras o formas complejas que no entiendes. Por suerte, el holandés estándar de los cursos de Babbel es la lengua franca de todo el país y de otros como Bélgica , por lo que no vas a tener ningún problema en comunicarte con lo que aprenderás durante tus lecciones. Los cursos de Babbel están diseñados teniendo en cuenta el idioma materno de sus estudiantes. Es decir, Babbel ha creado lecciones únicas para hablantes del español y adaptado sus contenidos a ellos. De esta manera, conseguirás comenzar el aprendizaje de holandés partiendo de las habilidades que ya tienes y que tu lengua te ha dado. Así, se consigue un progreso mucho más rápido y se asimilan los contenidos del curso de forma más eficaz. A esto se le suma el hecho de que las lecciones no tienen una duración mucho mayor de los 15 minutos: aprender holandés solo te requerirá el tiempo justo para que puedas compaginarlo con todo lo demás.
Una de las cosas más interesantes de este curso es que puedes acceder a todos los contenidos desde tu móvil a través de la aplicación de Babbel:
Estudiar 15 horas con este recurso ha demostrado tener la misma efectividad que pasar un semestre completo en una institución de idiomas convencional.
Disponible para sistemas iOS y Android, está sincronizada con el portal web, de manera tal que puedes estudiar en cualquiera de las dos plataformas, ya que el progreso queda reflejado en ambas.
Los ejercicios de holandés que encontrarás en esta herramienta tienen una probada efectividad, gracias a que han sido diseñados por un equipo de profesionales expertos en la didáctica de idiomas.
La app dispone de una función de repaso inteligente que creará unidades exclusivas para ti, a partir de los ejercicios que hayas hecho antes y que requieran de un poco más de trabajo para conseguir dominar sus contenidos.
Ahora con Babbel puedes aprender holandés fácil si sigues el método que has descubierto aquí. Dispones de una app para llevar contigo siempre tus lecciones, y el contenido está completamente adaptado a tus características como hablante del español para que puedas progresar con mayor soltura. Además, cuentas con audios y ejercicios de conversación hechos con hablantes nativos para que captar los acentos y matices sea algo intuitivo. Para aprender holandés con más facilidad cuentas con suscripción de 1, 3, 6 o 12 meses. De esta manera, se evita que encuentres publicidad en la app o el portal web. Y ten presente que puedes probar sin compromiso una lección gratuita y descubrir si esta es la forma en la que quieras aprender una nueva lengua.
La forma de decir "hola" en holandés varía según la hora del día y de la región en la que te encuentres. Sé educado, aprende todas las formas posibles e interactúa con los nativos correctamente
Holanda está plagada de curiosidades culturales, históricas y geográficas. Un país que se ha convertido en la región más cosmopolita de toda Europa
Ni el holandés procede del alemán ni viceversa. Ambos idiomas tienen raíces germánicas y son considerados como idiomas por los lingüistas especializados
